La adopción de stablecoins en EE. UU. enfrenta desafíos en medio de la demanda global
La adopción de stablecoins entre los consumidores estadounidenses está experimentando una desaceleración notable en 2024, a pesar de un aumento en la actividad de Bitcoin tras la introducción de fondos cotizados en bolsa de Bitcoin. Datos recientes indican una disminución en las transacciones en plataformas reguladas en EE. UU. durante el último año, principalmente debido a desafíos regulatorios y problemas de adopción relacionados con stablecoins basadas en EE. UU. En contraste, las stablecoins de los mercados emergentes están viendo una implementación creciente, ya que sirven como herramientas vitales para la transferencia de valor y transacciones rentables a nivel mundial.
A medida que los países se esfuerzan por establecer una base de activos más estable, particularmente en forma de dólar estadounidense, las stablecoins están preparadas para mejorar la inclusión financiera global, especialmente en regiones que carecen de monedas estables. La capitalización actual del mercado de criptomonedas se sitúa en 2,26 billones de dólares, con aproximadamente 1 billón de dólares estadounidenses encontrado en el extranjero, lo que destaca el creciente papel de las stablecoins en la sustitución del efectivo en dólares en mercados locales volátiles. El CEO de Tether, Paolo Ardoino, enfatiza que la demanda de stablecoins es particularmente fuerte en países en desarrollo como Argentina, Turquía y Vietnam, donde las personas buscan protección contra la inflación y la depreciación de la moneda.
El panorama regulatorio en los Estados Unidos presenta desafíos significativos para los proyectos de stablecoin, colocando al país en una desventaja competitiva en comparación con los centros financieros en Europa y los EAU, que ofrecen entornos más favorables. Empresas como Circle han expresado su preocupación de que la falta de un marco regulatorio claro para las stablecoins podría poner en peligro los intereses estadounidenses. Sin embargo, hay un creciente llamado para que EE. UU. establezca pautas que promuevan el uso de stablecoins, ya que abordar esta brecha regulatoria es crucial para mantener la competitividad en el paisaje de activos digitales en evolución y fomentar la innovación dentro del mercado de stablecoins.