Las redes inalámbricas descentralizadas emergen en medio de la crisis de deuda de las telecomunicaciones
Las compañías de telecomunicaciones enfrentan una abrumadora deuda de 250 mil millones de dólares para la infraestructura 5G, lo que ha llevado a una lenta implementación y un cambio hacia redes inalámbricas descentralizadas. Las redes DeWi aprovechan la colaboración impulsada por la comunidad, incentivando a las personas a proporcionar ancho de banda y monetizar sus conexiones a Internet. Este modelo ha tenido éxito temprano con redes como Helium, que soporta miles de puntos de acceso y ofrece planes móviles asequibles. Además, avances tecnológicos como las eSIM y cambios regulatorios están reduciendo las barreras de entrada, nivelando el campo de juego para que las empresas más pequeñas compitan con los gigantes de las telecomunicaciones.